El equipo de 'Keeping Up with the Kardashians' está siendo interrogado por la policía, que sospecha que los dos robos producidos en las casas de Khloé y Kourtney Kardashian son obra de alguno de los miembros del programa de telerrealidad.

Las dos hermanas han sufrido los robos en sus viviendas habituales -donde se graban los capítulos de la serie documental. En el caso de la antigua presentadora de 'Factor X', han desaparecido joyas por valor de 250 000 dólares (180 000 euros) del hogar que compartía con su exmarido, Lamar Odom, mientras que a su hermana le han robado 50 000 dólares (36 000 euros) en metálico de su mansión de Calabasas (California).

Fuentes de las fuerzas del orden explicaron al portal TMZ que no había señales de que las puertas hubiesen sido forzadas en ninguna de las dos propiedades, y todo indicaba que los ladrones sabían qué estaban buscando -en el caso del robo a Khloé, que se produjo el mes pasado, solo se llevaron las piezas más caras, dejando otras joyas de menor valor.

Por su parte, Kourtney sufrió el robo hace unas semanas -justo después de cobrar en metálico una actuación-, y aunque creyó haber puesto el dinero en un lugar seguro, días después vio que había desaparecido.