No cabe duda de que la fama mundial te pone bajo el escrutinio de la gente, y complacer a todos los “opinólogos” es algo imposible de lograr, esta situación la está viviendo en carne propia Liam Payne.

Parece que muchas personas están llevando un riguroso control del peso del joven miembro de One Direction y consideran que está muy pasado de kilos, lo cual es un pecado imperdonable para los estereotipos hollywoodenses.

Liam respondió a las críticas de manera original. “Acabo de ver en Twitter que la gente cree que estoy gordo. Nunca me han llamado gordo antes, así que estoy de camino a McDonald’s para después irme a un campamento para gordos”, escribió sarcástico en Twitter.

El artista ya se había manifestado cansado de ser juzgado y etiquetado por cualquier cosa que haga, así que nos parece genial que le reste importancia a los comentarios mal intencionados con mucho sentido del humor.