La angelical Katy Perry disfrutó el pasado fin de semana de una intensa jornada de música durante el popular Festival de Coachella (California), y estando allí no pudo evitar sucumbir a la última moda de los 'selfies' (autorretratos) cuando una de sus fieles seguidoras le pidió que apareciera a su lado en una fotografía.

"Queridos amigos del festival, recordad que los 'selfies' son una enfermedad (sic)", escribió la cantante poco después en su cuenta de Twitter, lo que parece constituir una crítica velada a una tendencia social que, especialmente en los últimos meses, parece haberse propagado con rapidez por toda la comunidad virtual.

Poco antes de mezclarse con el público del Festival de Coachella, Katy Perry estuvo acompañada por el estilista Johnny Wujek en la fiesta privada que la revista Harper's Bazaar organizó el viernes en Palm Springs (California), un evento al que decidió acudir simplemente porque no tenía mejores planes para la noche previa a la llegada del fin de semana.

"Voy siguiendo a las masas, la verdad es que últimamente no tengo compromisos en mi agenda, no tengo nada programado", señaló con cierta indiferencia al portal Pret-a-Reporter durante la fiesta.

Tras poner fin recientemente a una relación de casi dos años con el músico John Mayer, la artista estadounidense ha demostrado que al menos cuenta con buenos amigos para superar definitivamente sus decepciones amorosas, por lo que el sábado se dejó ver junto al actor británico Robert Pattinson durante una fiesta especial organizada por la cadena de moda H&M.

"Llegaron separados, con 10 minutos de diferencia, sobre la una y media de la madrugada. Se reunieron en la zona VIP durante la sesión de Major Lazer y se dieron un cariñoso abrazo", reveló una fuente al portal Celebuzz.