Once meses atrás este caso de atropellamiento llegó a una comisaría californiana, sin embargo, en su momento, un Juez ya había determinado que Bieber era inocente, puesto que no habían pruebas suficientes para acusarlo.

En junio del año pasado, el cantante, en su afán por escaparse de los paparazzi y evitar que le tomen fotografías, había acelarado su Ferrari para sacarse de encima al reportero gráfico Walter Lee, arrollándolo y causándole varias lesiones. Como el cantante fue encontrado inocente, Lee no quedó nada conforme y reunió más pruebas que demuestran la culpabilidad del artista.

El fotógrafo pretende que todos los gastos médicos en los que incurrió como consecuencia de la colisión sean pagados por el mismísimo Bieber, para eso, Lee, acercó nuevamente a la Corte una serie de documentos que considera suficientes para procesar al ídolo pop.

¿Cómo continuará este caso?