En declaraciones a Teleshow, María Teresa López explicó, en primer lugar, que la cámara oculta que provocó la supuesta descompensación de la señora Almirón no iba dirigida a ella. Asimismo, expresó que según datos con los que cuenta, el día que se grabó la broma para el programa El Conejo, la señora Almirón debía realizarse unos estudios médicos en el IPS.

“La broma no iba dirigida a la señora, ella pasaba por allí cuando se grabó el sketch. Luego la llevaron al IPS para ver si efectivamente sufrió una descompensación. La estabilizaron, estuvo normal y la hicieron la revisión”, comentó la abogada y periodista, quien insistió que los chequeos rutinarios se deben a que la señora padece problemas cardíacos, por la que es tratada regularmente. “Es un problema que ella arrastra y su internación no fue por el susto de la cámara oculta”, precisó.

No temen demanda

En relación al anuncio de que supuestamente, la familia Almirón está analizando una demanda contra la productora de El Conejo, López indicó que ellos están en su derecho de accionar si así lo consideran.“La familia de la señora puede tomar decisión que quiera, asumir lo que crea corresponde. Pueden plantearlo dentro de la libertad de expresión que tiene y ejercer como mejor nos parezca”, aseveró.

Insistió que aunque es una decisión de los Almirón, ella se acercó a la familia para dialogar. “Yo hablé con la mamá y las tres hijas. Ellas me dijeron que querían esperar y no recibir una ayuda. Primero pidieron y luego no”, aseveró la abogada.

Indicó que la productora de Palo Rubín se puso a disposición en todo momento, pero que rechazaron la ayuda inicial ofrecida. “Nosotros no tenemos inconveniente en conversar con ellos, yo personalmente hablo con la familia, con las tres hijas de la señora. Y les ofreció ayuda económica, no porque admitamos una responsabilidad, sino a modo de una colaboración”, agregó luego la abogada de Palo Rubín.