A la comunicadora Sara Dihl se la ve siempre muy activa en su cuenta de twitter, donde su opinión siempre es puntal de debate. Pero en los últimos tiempos, la mirada política no escapa a su mirada, que no siempre es bienvenida.

Recordemos que fue panelista de “El Repasador” donde su salida se dio en medio de una controversia cuando denunció por acoso a Eduardo Pipó Dios Kostianovsky. Posteriormente, y ante los ataques de Julián Crocco en Twitter a Sara, ésta, terminó demandándolo por violencia telemática. Éste a su vez, la demandó por difamación, injuria y calumnia.

“Cuando se dio mi salida de canal trece empecé, siempre interactué, pero mis escritos no estaban dirigidos a la política, y te soy sincera, decidí hacerlo también cuando emprendí, ahí dejé de ser una simple ciudadana”, explicó en comunicación con nuestra web y haciendo la seña de comillas con las manos alrededor de “simple ciudadana”.

Sara, además de Licenciada en comunicación, emprende un negocio de fabricación de guampas. “Son guampas de porongo, bombillas de alpaca uruguayas, tenemos grabados láser”, explica, alegando que se están mudando a un conocido shopping center.

“Emprender en este país hundido en la corrupción te hace exigir aún más tus derechos, cuando ves lo que hacen con tus impuestos, y ver cómo te pisotean… como lo hacen acá nuestros gobernantes es inadmisible, muchas veces no te involucras por ser uno más, pero créeme que cuando pagas 5 millones de IVA para arriba, y miras a tu alrededor y ves que en lugar de hacer algo por tu país, solo se llenan los bolsillos con tu dinero, te causa una impotencia horrible”, alegó.

“Los detractores aparecen cuando das tu opinión o tu parecer y es diferente a las de ellos, o por el fanatismo que viven por un partido político, yo no sigo ninguna línea política, ni me interesa, si te fijás mis comentarios van dirigidos a todos los partidos, en su mayoría al partido colorado porque es el partido político que hace más de 70 años nos tiene padeciendo un sistema de salud deplorable, una educación paupérrima, y sufriendo una inseguridad tremenda, todo esto va empeorando día tras día”, disparó.

“Yo en El Repasador intenté ganarme mi lugar, pero me pusieron el palo en la rueda innumerables veces, ahí existe gente maravillosa, un gran equipo humano que es totalmente diferente a los que salen en pantalla, siempre que utilizan eso como ataque, me cago de risa, porque, así como la pasé mal, también viví momentos re lindos con mis compañeros del área de producción”, sostuvo.