El relato del recital de Bad Bunny de Marly Figueredo
Una de las figuras públicas que estuvo presente en el recital de Bad Bunny fue Marly Figueredo que también fue crítica con lo que se vivió esa noche en relación a la organización.
“Apenas se dijo que iba a venir a Paraguay ya mi hijo me pidió, hace casi un año”, explicó la ex modelo a nuestra web. “Le compramos un camarote a él y a las hijas de Rodolfo que son todos adolescentes, le llevamos en total a diez chicos a cuidarles”, alegó. “El show de otro nivel, muy bien hecho, pero sinceramente pasamos mal”, enfatizó.
“No fue lo que esperábamos, no sabría decirte quienes son responsables de eso, hay muchos factores que ya no se pueden controlar; los estafadores, la gente inadaptada social que entró al concierto sin pagar, la falta de profesionalismo en preparar una precaria infraestructura que no de abasto. Que dejen a más de 60 personas, o más de lo que pude ver, afuera del camarote porque ya no había lugar según los guardias de seguridad (tengo entendido que cayó un sector de la tarima)”.
“Nosotros teníamos un voucher que se canjeaba, la mesa costaba tanto y a cambio tenías que recibir bebidas. Pero ni eso se dignaron a darnos, los chicos pasaron en un momento mucha sed. Empezamos a buscar cantinas, pero había faltantes en las cantinas. Los vendedores ofrecían a 25 mil cada botella de agua. Parecía un mundo paralelo. Igualmente conseguimos el agua, le dimos a los chicos y también empezamos a invitar a varios adolescentes que estaban deshidratándose”.
“Algunos venían a pedir a nuestros hijos o sobrinos agua y le dábamos. Pero aparte de esas cosas, tratamos de divertirnos. Falta mucho que pulir aún. Baños bien. Guardias internos bien pero grandísimos mal educados. El que no me dejó entrar a mi camarote, como si fuese que uno va gratis a ese lugar. Pagué eso porque mi responsabilidad eran diez adolescentes fans de Bunny. Muchos fueron testigos que casi al final se me perdió uno, pero lo encontré después de media hora en otro sector”.