A Jennifer Lawrence no le gusta ser la villana
La actriz Jennifer Lawrence vuelve a meterse en la piel de la mutante de color azul Mística para la nueva película 'X-Men: Días del Futuro Pasado', aunque en esta ocasión el nuevo lado oscuro de su personaje le ha provocado algún que otro dolor de cabeza, llegando a tener problemas para ceñirse al guion durante la grabación de algunas escenas.
"Me debatía constantemente con el hecho de que alguien pudiera querer pasarse al lado oscuro. Hubo una escena en la que no podía dejar de pensar que acabaría disparando a alguien, aunque ni siquiera estaba en el guion. Al final rodamos las dos versiones, aunque no sé cuál van a utilizar", explicó al portal Total Film.
Pese a los dilemas morales que le ha supuesto volver a retomar el personaje de Mística, esta nueva entrega de 'X-Men' le ha dado a la actriz la oportunidad de volver a coincidir con Bryan Singer. La noticia de que el director aceptaba volver a dirigir la saga supuso una gran alegría para Jennifer, ya que disfrutó mucho trabajando con él en el pasado.
"Fue increíble. Por dentro estaba como un niña pequeña dando saltos cuando me enteré de que había aceptado volver a dirigirnos", explicó.
Durante todo el rodaje de la película, tanto el director como el resto del equipo intentaron hacer que la espera para ver la nueva entrega fuese un poco más llevadera para todos los seguidores de la saga, compartiendo fotos de los actores y algunas escenas a través de Twitter.
"Bryan Singer sacaba fotos de todo. Siempre llevaba el teléfono a todas partes. Parecía una adolescente de 15 años durante el estreno de una película", bromeó.