Nos llegó el rumor de que Vivi Figueredo no estaba pasando muy bien en Madrid, que está enfrentada con una parte de la comunidad paraguaya. Nos comunicamos con ella y nos confirmó que está sufriendo los ataques de algunas mujeres “moralistas”. “A muchos parece que les da envidia que yo estoy bien, súper tranquila aquí”, empezó diciéndonos. Dijo que si bien también hay hombres mala onda, son más las mujeres.

-¿Qué te dicen o te hacen?

-¡Miércoles... que me da rabia! A algunos les cansa que hable a cada rato de mi barrio.

-¿Cuál es tu barrio?

-Móstoles. Vivo en un apartamento que queda como a 15 minutos de la ciudad de Madrid. Especialmente a unos paraguayos pareces que les molesta. Primero que nada, si quiero escribir 20 veces que me encanta Móstoles lo voy a hacer. ¡Joderrr! Jamás lográs darle el gusto a todos. Que si estoy en Madrid, que por qué Madrid, que si estoy en las afueras, que por qué vivo en la campaña. ¡Joderrr! Me tienen harta con sus comentarios absurdos.

-¿Creés que los paraguayos son envidiosos, mala onda? ¿O son las paraguayas?

-Son esas paraguayas envidiosas. ¡Pesadas! Esas que se creen gua'u las moralistas. ¡Moopio...!

-¿Podés contarnos algo que te dijeron?

-Me paran por la calle diciéndome que deje bien parado a Paraguay. ¡Che pio Miss Paraguay mba'e! Yo no soy embajadora de Paraguay. Moopio si acá se hacen las santitas cuando muchas salen con ecuatorianos y eso para que les mantengan. Y me juzgan gua'u porque yo me prostituía.