Larissa Riquelme tuvo un golpe de suerte en el Mundial de Sudáfrica y supo seguir en vigencia con la ayuda de su carisma y simpatía. No cabe dudas de que ella logró mantener lo que le otorgó la fortuna con mucho trabajo, y se aseguró de llegar tan alto que resultará muy difícil para cualquier otra señorita superar su alcance.

Su nombre volvió a sonar con fuerza con la celebración del Mundial de Fútbol de la FIFA en Brasil y se convirtió en punto de referencia para una gran cantidad de chicas de todo el mundo que intentaron imitar sus logros, vestirse como ella y hasta le dedicaron canciones; sin embargo, ella, lejos de preocuparse por ello, apunta a metas más altas y sabe que en muchos países sigue siendo muy querida.

La siempre Novia del Mundial estuvo trabajando como reportera para el programa Samba y Gol de Panamericana TV de Perú, dejando en claro que ahora busca explorar otras facetas para seguir creciendo en su carrera.

Al mismo tiempo, sigue avanzando en la competencia en el programa Baila Conmigo Paraguay, y continúa recibiendo interesantes propuestas laborales de varios países. Eso sin mencionar que su corazoncito está muy bien cuidado por su pareja de hace tiempo, el jugador de fútbol Jonathan Fabbro.

La morocha sigue avanzando a paso firme, a pesar de que está pasando por un difícil momento familiar. Luego de la detención de su hermano Freddy, ella dejó atrás el dolor para dar la cara y con gran fortaleza dejar en claro a la opinión pública que el amor por su familia es incondicional y que apoyará a su hermano en las buenas y en las malas.

Dentro del ritmo vertiginoso que está teniendo su vida en estos momentos, la diosa guaraní no se detiene ante las adversidades y busca nuevos desafíos. Muchas podrán buscar imitarla o intentar ocupar su lugar, pero es difícil que se repita lo que consiguió lograr ella. Siempre será la única 'Novia del Mundial'.